A todos nos ha pasado alguna vez: entrar en una habitación o abrir un armario y, de repente, el olor a «rancio» nos impregna. En ocasiones este olor es difícil de eliminar e incluso nos acompaña a la calle adherido a nuestra ropa, debido a que los tejidos absorben los olores con facilidad. Sin embargo, con una buena limpieza y unos sencillos trucos sabrás como quitar el mal olor en una casa cerrada.
1. Utiliza la ventilación cruzada para renovar el aire de tu hogar
En la mayoría de las ocasiones, el olor a cerrado proviene de la ventilación insuficiente de nuestras habitaciones. La falta de ventilación provoca que el ambiente se cargue de aire viciado y hace que los ácaros se desarrollen en nuestra casa con mayor facilidad. Para favorecer el intercambio de aire, bastará con que abras tus ventanas durante 15 minutos al día y, mejor aún, si estas se encuentran en fachadas opuestas, favoreciendo así la ventilación cruzada.
2. Elimina el exceso de humedad
Si vives en un lugar donde la humedad relativa es alta, es normal que tu casa presente ese olor a «cerrado». No tienes porqué cambiar de ciudad, para reducir la humedad por condensación bastará con que uses extractores en el baño y la cocina, te hagas con un buen deshumidificador para el resto de la casa y evites actividades que generen vapor de agua (como secar la ropa dentro de casa o cocinar sin tapas en las ollas).
3. Apuesta por absorbentes de olor naturales
No hay nada más efectivo y económico que recurrir a productos naturales. El café en grano, el carbón vegetal, el bicarbonato o la canela en rama pueden ser tus aliados para quitar el olor a cerrado de tu casa. Colócalos en recipientes de vidrio o envueltos en tela para evitar manchar tus pertenencias y ponlos en aquellos lugares de la casa más oscuros y que presenten menor ventilación (como armarios o rincones con poca luz). Ya verás como en un par de días comienzas a notar la diferencia.
4. Elimina los olores de los tejidos
Lava concienzudamente fundas de sofás, alfombras, cortinas y ropa. El limón o el vinagre pueden ayudarte a eliminar los olores de estos tejidos y, además, previenen la aparición de mohos. Diluye el jugo de un limón o medio vaso de vinagre con medio litro de agua y aplica la mezcla sobre estos elementos ayudándote de un spray. Deja actuar durante un día y, a continuación, lava como harías normalmente. Intenta secar todo al aire libre y verás como tu casa recupera un ambiente fresco y agradable.
5. Utiliza los ambientadores apropiados
Muchos ambientadores tan solo ocultan el olor a humedad, por eso, asegúrate de comprar aquellos que, además de aportar aromas, también ayuden a eliminar el mal olor. Existen en muchas versiones: en spray, automáticos o velas aromáticas. Lo mejor es que te decantes por olores frescos y livianos que no carguen aún más el ambiente; una buena opción son los aromas de pino, lavanda o limón.
Ahora ya sabes como quitar el mal olor en una casa cerrada con éxito, con solo usar unos sencillos trucos.